¿Por qué es importante el consumo de pescado?
Es una buena fuente de nutrientes. Contiene proteínas de alto valor, minerales (yodo, calcio, fósforo y magnesio), vitaminas (A, D y del grupo B), y, sobre todo, un tipo de grasas muy sanas, llamadas ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (AGPICL) de la serie omega-3.
¿Qué funciones tienen los ácidos grasos poliinsaturados omega-3?
Actúan en la formación de la retina, el cerebro y el sistema nervioso durante el desarrollo del feto y del niño.
Tienen efectos favorables sobre la coagulación, el perfil de las grasas de la sangre, la tensión arterial y la inflamación. Todo ello disminuye las enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos del adulto.
¿Qué alimentos son fuentes de ácidos grasos poliinsaturados omega-3?
El pescado y sus aceites sobre todo. También las nueces y la leche, sobre todo la que se enriquece de forma artificial. Así es en la mayor parte de fórmulas para lactantes y «de crecimiento», y en algunas leches para el adulto.
Por otra parte, los ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga de otro tipo, los omega-6, están presentes, sobre todo, en algunos aceites vegetales: soja, maíz, girasol…
¿Tiene ventajas el pescado sobre la carne?

  • Las grasas de la carne son casi todas saturadas. Son menos sanas que las del pescado.
  • Los peces grasos aportan vitamina D, la carne no.
  • El pescado es de más fácil digestión.
  • Tiene muchas proteínas de alto valor biológico (con todos los aminoácidos esenciales y en la tasa adecuada), aunque algo menos que las carnes.

¿Cuáles son sus desventajas?

  • Es más escaso y, salvo excepciones, más caro.
  • Su conservación es más difícil.
  • Siempre se debe congelar, para eliminar una posible contaminación por unos parásitos del mar llamados anisakis.
  • Los niños lo aceptan peor, por su olor y sabor fuertes, las espinas…
  • En la ingesta de los niños y de las mujeres gestantes o lactantes, hay que limitar algunos peces por la contaminación del mar por mercurio (ver artículo “¿Pescado blanco o pescado azul? El peligro del mercurio en la ingesta de pescado”).

¿Cuál es la ración habitual recomendada de pescado?
El tamaño de la ración debe ser de unos 100-125 g en adultos y 70 g en niños. En los lactantes, la ración inicial será más pequeña (25-50 g).
Se recomienda comer al menos 2, mejor 3 ó 4, raciones de pescado a la semana. Mejor variar las especies y con la menor presencia de mercurio. Es decir: pescado blanco 2-3 veces por semana y pescado azul pequeño una vez por semana.
¿Cuándo introducirlo en la alimentación infantil?
Se puede introducir a partir del 6º mes, como el resto de la alimentación complementaria. Pese a ello, en nuestro país, más por costumbre que por una razón científica, que no la hay, se suele hacer de otra forma. El pescado blanco después de la carne, sobre los 8-9 meses de edad, y el pescado azul a partir de los 15-18 meses de edad.
¿Qué lugar ocupan dentro de la pirámide alimentaria?
Ocupan el mismo lugar nutricional que las carnes magras y los huevos. Son alimentos más o menos equivalentes. Se recomiendan 3-4 raciones a la semana.
¿Qué importancia tiene el marisco?
Se relega a un segundo puesto en la dieta por su precio. Es más un artículo de deleite. Pero también son fuente importante de proteínas y sus grasas, aunque escasas, suelen ser poliinsaturadas. Su consumo ocasional puede contribuir a una dieta más sana.
Trucos para mejorar la aceptación del pescado por los niños
– Dar pescado desde que cumpla la edad para ello. Que se acostumbre a su sabor cuanto antes. Añadirlo poco a poco al puré de verduras puede ser un buen inicio.
– Aprovechar cuando tenga hambre. Mejor en plato único. Si se da de segundo plato, el primero debe ser ligero.
– Se puede mezclar con los alimentos que más le gusten al niño. También disimular su sabor: macerar con limón, aceite y/o hierbas. En el niño mayor no conviene ocultarlo del todo, pues debe aprender que es un alimento muy importante.
– Usar trozos sin espinas. Revisar una vez más antes de servir.
– Usar pescado congelado, igual de beneficioso, más barato y fácil de cocinar. Es mejor un descongelado lento (en la nevera).
– Aprovechar las ventajas del pescado en conserva: sardinas, caballa, atún…
– Preparar de formas distintas, que no resulte aburrido:

  • La cocción se puede hacer en agua (hervido, escalfado), en aceite (fritura, salteado, rehogado, sofrito), en seco (a la plancha, a la parrilla, al horno, gratinado) o de otras formas (al vapor, al baño María, en papillote, al microondas).
  • Hay varias presentaciones, sobre todo para el pescado congelado: filetes, ruedas, lomos, troncos, colas…
  • Puede formar parte de empanadillas, croquetas, buñuelos, albóndigas, budín, lasaña, canelones, en tortilla, rellenos,… etc.

 

Luis Carlos Blesa Baviera. Pediatra. Centro de Salud «Serrería II». Valencia

Grupo de Gastroenterología y Nutrición. AEPap.

 
Fuente: Familia y Salud
http://www.familiaysalud.es/vivimos-sanos/alimentacion/los-alimentos/la-importancia-del-pescado-en-la-alimentacion-infantil