El mes de mayo llega cargado de variadas y sabrosas frutas de temporada. Una de ellas es la nectarina. Una fruta muy saludable, con gran proporción de agua, rica en fibra, depurativa, y un bajo aporte calórico.

También conocida por pelón, pavía (Aragón) o briñón, se cultiva sobre todo en Lérida, Huelva, en el valle del Jerte (Extremadura) y en la sierra de Gredos.

Aunque hasta hace poco se creía que esta fruta era el resultado de un injerto de ciruelo y melocotonero, actualmente se considera una variedad de melocotón con piel lisa, sin pelo, consecuencia de mutaciones naturales.

La nectarina tiene un color rojo intenso y un sabor dulce (su nombre hace referencia al néctar). Hay dos variedades principales, una con pulpa blanca (un poco más ácida) y otra con pulpa amarilla (más dulce).

A la hora de comprarla, hay que elegir aquella con piel lisa y brillante, no excesivamente duras, bien madura y aromática.

Es una fruta muy frágil, hay que andar con cuidado a la hora de manipularla, ya que se estropea fácilmente. Se conserva bien a temperatura ambiente y en el frigorífico puede durar varias semanas.

Además de consumirlas crudas, también se emplean como ingrediente en ensaladas, salsas y en repostería: mermeladas, compotas, helados, jaleas, bizcochos…

Beneficios nutricionales

Es una fruta muy saludable, digestiva y con un elevado poder saciante. Las nectarinas tienen un gran porcentaje de agua, 87 gramos de cada 100, y un aporte mínimo de calorías, 100 gramos no comportan más de 43 kcal. Además, es rica en fibra, refuerza el sistema inmunitario y es una opción ideal para bajar el colesterol.
Aporta vitamina C y minerales como el calcio, fósforo, magnesio y potasio.

 

Sólo se permite la utilización de este contenido en otros sitios web enlazando con nuestra url, mencionando como fuente a cuidateycomesano. 
© Cuidateycomesano, Madrid 2020. Aviso Legal